El arroz frito chino es uno de esos platos que nunca falla cuando quiero algo rápido, sabroso y lleno de sabor. Aunque hoy en día lo vemos en casi todos los menús de comida china en el mundo, su historia es muy interesante. Este plato nació como una manera ingeniosa de aprovechar el arroz sobrante en las casas chinas, especialmente en épocas en las que la comida no se desperdiciaba ni un poco.
Lo genial del arroz frito es que es muy adaptable dependiendo de la ocasion. Básicamente puedes usar cualquier ingrediente que tengas en la nevera: verduras, huevos, trocitos de carne, o incluso camarones. En la cocina tradicional china, se suelen usar ingredientes como cebollín, brotes de soja, zanahoria, y a veces un poco de jamón o char siu (cerdo asado chino) para darle un toque especial. La salsa de soya es otro ingrediente clave, ya que le da ese color y sabor inconfundible al plato.
Una de las cosas más importantes para lograr un buen arroz frito es que el arroz esté frío y preferiblemente cocido del día anterior. Esto ayuda a que los granos queden sueltos y no se conviertan en una masa pegajosa al freír. Además, el wok, un sartén típico de la cocina asiática, es perfecto para darle al arroz ese sabor ligeramente ahumado que lo hace tan delicioso.
Este plato es ideal para acompañar cualquier comida o como una comida completa por sí sola. Me encanta personalizarlo según mi antojo del momento, añadiendo un poco de sriracha para un toque picante o espolvoreando semillas de sésamo para un extra de textura. ¡Es un plato clásico que siempre encuentra la manera de adaptarse a cualquier paladar!
Asegúrate de que el arroz esté frío, ya que esto ayuda a que los granos queden sueltos al freírlos.
Calienta 1 cucharada de aceite en un wok o sartén grande a fuego medio-alto. Vierte los huevos batidos y cocínalos, revolviendo ocasionalmente, hasta que estén completamente cocidos. Retíralos de la sartén y resérvalos.
En la misma sartén, añade otra cucharada de aceite. Agrega la cebolla picada, el ajo, la zanahoria y los guisantes. Cocina durante unos 3-4 minutos, hasta que las verduras estén tiernas.
Agrega el arroz frío a la sartén con las verduras y saltea todo junto, mezclando bien. Cocina durante unos 2-3 minutos para que el arroz se caliente y comience a dorarse ligeramente.
Vuelve a añadir los huevos cocidos a la sartén y mézclalos con el arroz. Agrega la salsa de soya y el aceite de sésamo (si lo usas). Remueve bien hasta que el arroz esté bien sazonado y todo esté combinado. Ajusta la sal y pimienta al gusto.
Espolvorea el cebollín picado por encima y sirve el arroz frito chino caliente.
Añade camarones, pollo o cerdo en cubos para hacer el arroz más completo.
Puedes añadir pimientos, maíz, brócoli o champiñones según tu gusto y disponibilidad.
El arroz del día anterior funciona mejor en esta receta porque es menos pegajoso y más fácil de freír.
Usa salsa de soya baja en sodio si prefieres controlar el nivel de sal en la receta.
Chef Goya es un renombrado experto culinario, conocido por su habilidad para transformar ingredientes simples en platos extraordinarios. Con más de dos décadas de experiencia en las cocinas más prestigiosas del mundo, ha perfeccionado el arte de la cocina, fusionando técnicas tradicionales con innovaciones modernas. Nacido en una familia Mexicana apasionada por la gastronomía, Chef Goya desarrolló su amor por la…
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