Hoy te quiero compartir una receta súper fácil y con un sabor dulce cítrico que se que te va encantar, te presento el pollo con piña o pollo a la piña. Este plato combina lo mejor de dos mundos: la jugosidad del pollo y el toque dulce y tropical de la piña. Es ideal para cuando quieres algo diferente y lleno de sabor sin pasar horas en la cocina.
Si nunca haz escuchado de esta receta, pues bien, déjame contarte que es muy famosa, el pollo con piña es un plato que tiene sus raíces en la cocina fusión, donde se mezclan sabores dulces y salados. Aunque no tiene un origen claro, es muy popular en la cocina asiática y hawaiana, donde la piña es un ingrediente clave en muchos platos. Lo que me encanta de esta receta es cómo la piña, con su toque ácido y dulce, resalta el sabor del pollo y lo transforma en algo completamente diferente.
La piña no solo le da un toque dulce al pollo, sino que también ayuda a ablandar la carne gracias a sus enzimas naturales. Así que, además de ser deliciosa, hace que el pollo quede súper jugoso. Puedes también jugar con los ingredientes y adaptarlo a tu gusto. Si te gusta un toque más picante, puedes añadir un poco de chile o salsa picante, o si prefieres algo más ácido, solo ajusta la cantidad de vinagre.
Lo mejor de todo es que es súper rápido de hacer. En menos de 40 minutos tienes un plato listo que sabe como si te hubieras esforzado mucho más. Y, por supuesto, siempre queda perfecto con un buen plato de arroz blanco. Así que si te animas a probar este pollo con piña, aquí te dejo la receta completa para que la disfrutes. ¡Buen provecho!
Corta las pechugas de pollo en tiras o cubos, y sazónalas con sal y pimienta.
En una sartén grande, calienta 1 cucharada de aceite vegetal a fuego medio-alto. Añade el pollo y cocina hasta que esté dorado por todos lados, unos 5-7 minutos. Retira el pollo de la sartén y resérvalo.
En la misma sartén, añade la otra cucharada de aceite. Sofríe la cebolla, el pimiento rojo y el ajo durante unos 3-4 minutos, hasta que estén tiernos.
Añade el jengibre rallado (si lo estás usando) y cocina por 1 minuto más.
Añade los trozos de piña con su jugo a la sartén junto con la salsa de soya, miel (o azúcar morena) y el vinagre. Remueve bien todos los ingredientes.
Lleva la mezcla a ebullición, luego reduce el fuego y deja que se cocine a fuego lento durante 5 minutos para que los sabores se integren.
Regresa el pollo dorado a la sartén con la salsa de piña. Cocina a fuego lento durante 5-7 minutos más, o hasta que el pollo esté completamente cocido y la salsa se haya reducido un poco.
Sirve el pollo con piña caliente, acompañado de arroz blanco o arroz jazmín.
Decora con perejil o cilantro fresco picado para darle un toque de color y frescura.
Si prefieres, puedes dorar el pollo primero y luego transferir todo a una bandeja para hornear. Cocina a 180°C (350°F) durante 20-25 minutos hasta que el pollo esté bien cocido y la salsa espese.
Para darle un toque picante, añade un poco de chile picado o unas gotas de salsa picante a la salsa de piña.
Puedes sustituir el pollo por camarones, cerdo o incluso tofu para una opción vegetariana.
Si tienes piña fresca en lugar de enlatada, simplemente usa unos 200 g de piña troceada y añade 1/2 taza de jugo de piña o agua para la salsa.
Chef Goya es un renombrado experto culinario, conocido por su habilidad para transformar ingredientes simples en platos extraordinarios. Con más de dos décadas de experiencia en las cocinas más prestigiosas del mundo, ha perfeccionado el arte de la cocina, fusionando técnicas tradicionales con innovaciones modernas. Nacido en una familia Mexicana apasionada por la gastronomía, Chef Goya desarrolló su amor por la…
Seguir leyendo