Necesitas una receta para compartir con tus amigos, no te preocupes, te traigo la receta perfecta, te hablo de la pizza cubana. Este platillo es una deliciosa mezcla de sabores que combina lo mejor de la cocina italiana con un toque caribeño. Si te gustan las pizzas y te encanta experimentar con nuevos sabores, ¡esta receta es para ti!
Esta pizza cubana es uno de mis platos favoritos para cuando necesito hacer comida para compartir con mis amigos. Ya que combina sabores dulces y salados. Aunque puedes pensar que es parecida a la pizza Hawaiana, esta versión con la piña y el jamón juntos crean un equilibrio delicioso, ademas tiene chorizo donde le añade ese toque de picante que hace que cada bocado sea una explosión de sabor.
A diferencia de la pizza italiana tradicional, la masa de la pizza cubana tiende a ser un poco más gruesa y esponjosa. Esto se debe a la influencia de las panaderías cubanas, donde las masas tienden a ser más suaves y rellenas. Aunque las pizzas tienen su origen en Italia, la versión cubana es diferente y única. En la isla, la pizza se ha adaptado a los ingredientes locales y los gustos caribeños. Por ejemplo, en la pizza cubana no es raro encontrar ingredientes como el jamón, el chorizo, la piña, y las aceitunas, que le dan ese toque tan particular. Esta mezcla de ingredientes es un claro ejemplo de cómo la comida puede adaptarse y evolucionar en diferentes culturas.
Es perfecta para una noche de película, una reunión con amigos o simplemente cuando tienes antojo de algo diferente y delicioso. Así que si te animas a probar esta receta, aquí abajo te dejo las instrucciones completas para que puedas intentarla en casa. ¡Buen provecho!
En un tazón grande, mezcla la harina, sal, azúcar y levadura. Añade el agua tibia y el aceite de oliva. Mezcla hasta formar una masa suave.
Amasa la masa sobre una superficie ligeramente enharinada durante unos 5-7 minutos, hasta que esté suave y elástica.
Coloca la masa en un tazón ligeramente aceitado, cúbrelo con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
Mientras la masa reposa, prepara la salsa. En una cacerola a fuego medio, combina la salsa de tomate, la pasta de tomate, el ajo picado, el orégano, el azúcar (si lo usas), sal y pimienta. Cocina durante 5-7 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que los sabores se mezclen bien. Retira del fuego y reserva.
Precalienta el horno a 220°C (425°F).
Una vez que la masa haya reposado, golpéala suavemente para desgasificarla y estírala sobre una superficie enharinada hasta alcanzar el tamaño de tu bandeja de horno o piedra para pizza.
Coloca la masa estirada en la bandeja y esparce una capa uniforme de la salsa de tomate sobre la base.
Cubre con una generosa capa de queso mozzarella rallado. Añade el jamón, chorizo, piña (si lo usas), pimientos, cebolla y aceitunas.
Hornea la pizza en el horno precalentado durante 15-20 minutos, o hasta que la masa esté dorada y el queso burbujee y se derrita por completo.
Retira la pizza del horno y deja enfriar ligeramente antes de cortarla en porciones.
Para una masa más crujiente, puedes precocinar la masa sin toppings durante 5 minutos antes de añadir la salsa y los ingredientes.
Añade otros ingredientes al gusto, como champiñones, jalapeños o pepperoni.
Prueba con una base de salsa blanca (como una bechamel) para variar el sabor.
Puedes sustituir parte de la harina de trigo por harina integral para una versión más saludable.
Chef Goya es un renombrado experto culinario, conocido por su habilidad para transformar ingredientes simples en platos extraordinarios. Con más de dos décadas de experiencia en las cocinas más prestigiosas del mundo, ha perfeccionado el arte de la cocina, fusionando técnicas tradicionales con innovaciones modernas. Nacido en una familia Mexicana apasionada por la gastronomía, Chef Goya desarrolló su amor por la…
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