El pulpo al ajillo es uno de esos platos que son súper fácil de hacer, al igual que los camarones al ajillo, es una receta casi similar, con la diferencia que el pulpo es diferente en textura y sabor. Este plato combina la frescura y suavidad del pulpo con el sabor intenso y delicioso del ajo, haciendo que cada bocado sea una explosión de sabores. Es una receta fácil de preparar y perfecta para impresionar a cualquier invitado sin complicarse demasiado en la cocina.
Lo interesante del pulpo es que ha sido un ingrediente importante en la cocina mediterránea desde tiempos antiguos. Especialmente en países como España y Grecia, donde se disfruta en platos a la parrilla, guisos o, como en esta receta, salteado con ajo. Lo interesante del pulpo es su textura única: cuando se cocina bien, es tierno y jugoso, y al combinarlo con ingredientes sencillos como el ajo y el aceite de oliva, se logra un plato lleno de sabor.
Un truco me ha funcionado con los años es congelar el pulpo antes de cocinarlo, ya que esto ayuda a ablandar su carne. Después, lo cocino a fuego lento hasta que esté tierno y lo salteo rápidamente con ajo, perejil y un toque de vino blanco o limón para realzar los sabores. ¡No dudes en intentarlo!
Ademas el pulpo al ajillo es perfecto como plato principal, acompañado de papas o una ensalada ligera, o como una tapa para compartir con amigos. Y lo mejor es que, aunque parece sofisticado, en realidad es una receta bastante sencilla que te transportará a las costas del Mediterráneo con cada bocado.
Así que si te animas a prepararlo, aquí te dejo mi receta favorita de pulpo al ajillo. ¡Espero que te guste tanto como a mí!
Limpia bien el pulpo. En una olla grande, lleva agua a ebullición con sal, laurel y la cebolla. Una vez que hierva, "asusta" el pulpo sumergiéndolo y retirándolo del agua hirviendo 3 veces (esto ayuda a que se cocine más tierno).
Luego, déjalo cocer en el agua durante unos 45 minutos a fuego medio-bajo, o hasta que esté tierno. Una vez cocido, retíralo y déjalo enfriar. Corta el pulpo en trozos medianos o al gusto.
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Añade el ajo picado y sofríe hasta que esté dorado y fragante, aproximadamente 2-3 minutos. Ten cuidado de no quemarlo.
Agrega los trozos de pulpo cocido a la sartén con el ajo. Saltea durante 5-7 minutos hasta que el pulpo esté dorado y absorba los sabores del ajo.
Añade el pimentón, el jugo de limón, y el vino blanco si lo estás usando. Cocina por 2-3 minutos más para que los sabores se mezclen bien.
Retira el pulpo del fuego y sírvelo caliente. Espolvorea perejil fresco picado por encima y ajusta con sal y pimienta al gusto. Sirve acompañado de pan crujiente, papas al vapor o una ensalada fresca.
Si prefieres que el pulpo quede aún más tierno, puedes congelarlo previamente y descongelarlo antes de cocinarlo.
Añade una pizca de guindilla o chile seco a la sartén para darle un toque picante.
Si prefieres no usar vino blanco, puedes omitirlo o sustituirlo por caldo de pescado o simplemente agua.
Este plato va muy bien con papas cocidas, arroz blanco o incluso sobre una cama de ensalada verde.
Chef Goya es un renombrado experto culinario, conocido por su habilidad para transformar ingredientes simples en platos extraordinarios. Con más de dos décadas de experiencia en las cocinas más prestigiosas del mundo, ha perfeccionado el arte de la cocina, fusionando técnicas tradicionales con innovaciones modernas. Nacido en una familia Mexicana apasionada por la gastronomía, Chef Goya desarrolló su amor por la…
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