¡El pollo a la barbacoa es uno de esos platos que nunca fallan! Es un clásico que combina el sabor ahumado y dulce de la salsa barbacoa con la jugosidad del pollo, creando un plato perfecto para reuniones familiares, barbacoas al aire libre o incluso una cena reconfortante entre semana.
Aunque el concepto de asar carne al fuego es antiguo y universal, la versión que conocemos como “barbacoa” tiene raíces en las culturas indígenas del Caribe. Posteriormente, con la llegada de los colonizadores y la influencia de la cocina estadounidense, especialmente en el sur, la barbacoa evolucionó para incluir esa salsa icónica que mezcla tomate, vinagre, azúcar y especias.
Un dato curioso es que la barbacoa varía mucho según la región. En algunas partes de Estados Unidos, la salsa es más dulce, mientras que en otras es más picante o incluso ácida. Por eso, al preparar pollo a la barbacoa, puedes personalizar la salsa según tus preferencias. Yo a veces le agrego un toque de miel o un chorrito de jugo de limón para darle un giro especial.
La mejor es que puedes asar el pollo en la parrilla para darle un sabor más ahumado, cocinarlo en el horno para una versión más práctica o incluso usar una olla lenta para esos días en los que no tienes tiempo. A mí me gusta acompañarlo con una ensalada fresca, papas al horno o un buen pan de maíz.
Asi que si buscas una receta que sea fácil de preparar, llena de sabor y que le guste a todos, el pollo a la barbacoa es la opción ideal. ¡Espero que lo disfrutes tanto como yo cada vez que lo preparo!
Limpia y seca bien las piezas de pollo con papel de cocina. Retira cualquier exceso de grasa si lo deseas.
En un tazón pequeño, mezcla el pimentón, el comino, la pimienta y la sal. Espolvorea esta mezcla sobre el pollo, asegurándote de cubrirlo uniformemente.
En una sartén grande o parrilla precalentada, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto.
Dora las piezas de pollo por ambos lados durante 4-5 minutos, hasta que estén doradas pero no cocidas por completo.
Precalienta el horno a 200°C (400°F) o ajusta tu parrilla a calor medio.
Coloca las piezas de pollo doradas en una bandeja para hornear o sobre la parrilla.
Cepilla generosamente cada pieza con salsa barbacoa, asegurándote de cubrirlas bien.
Si usas el horno, hornea durante 20-25 minutos, volteando las piezas y aplicando más salsa a la mitad del tiempo.
Si usas la parrilla, cocina a fuego medio durante 20-25 minutos, volteando regularmente y pincelando más salsa para crear una capa caramelizada.
Retira del horno o parrilla y deja reposar 5 minutos antes de servir.
Decora con rodajas de limón o hierbas frescas si lo deseas.
Puedes hacer tu propia salsa barbacoa mezclando ketchup, miel, vinagre de manzana, ajo y especias.
Agrega unas gotas de salsa picante o hojuelas de chile a la salsa para un sabor más atrevido.
Usa muslos sin piel o pechugas de pollo para una opción con menos grasa.
Para un sabor más intenso, marina el pollo con la salsa barbacoa durante 2 horas o toda la noche antes de cocinar.
Chef Goya es un renombrado experto culinario, conocido por su habilidad para transformar ingredientes simples en platos extraordinarios. Con más de dos décadas de experiencia en las cocinas más prestigiosas del mundo, ha perfeccionado el arte de la cocina, fusionando técnicas tradicionales con innovaciones modernas. Nacido en una familia Mexicana apasionada por la gastronomía, Chef Goya desarrolló su amor por la…
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