Para los amantes del pan, les traigo mi receta favorita de pan pita que me encanta hacer para mis desayunos, este pan es súper versátil y, aunque parece complicado de hacer, en realidad es bastante sencillo y el resultado es increíble.
Por si no sabias, el pan pita tiene sus raíces en el Medio Oriente, donde ha sido un alimento básico durante miles de años. Este pan plano y suave es conocido por su bolsillo interior, que se forma cuando se cocina, lo que lo hace perfecto para rellenar con todo tipo de deliciosos ingredientes. En países como Grecia, Líbano, y Turquía, el pan pita es una parte fundamental de la comida diaria, y es común verlo acompañando todo tipo de platos, desde kebabs hasta ensaladas.
Aunque se que puedes comprar pan pita en la tienda, hacerlo en casa tiene un toque especial. Ya que es sorprendentemente fácil, y el sabor y la textura son mucho mejores que los de cualquier pita que puedas encontrar en un supermercado. Ademas, puedes usarlo para hacer sándwiches, acompañar hummus o cualquier tipo de dip, o incluso cortarlo en trozos y hornearlo para hacer chips crujientes. ¡Tienes muchas posibilidades!
Encima lo genial de este pan pita es cómo se infla durante la cocción, creando ese espacio perfecto para rellenar. Esto sucede gracias al vapor que se genera dentro de la masa cuando se cocina a alta temperatura, haciendo que las capas de masa se separen. Así que aprovecha para añadir lo que tu prefieras, puedes agregar, carne, pollo, camarones, lo que tu prefieras.
Aquí te dejo mi receta para el pan pita. ¡Espero que te animes a probarla y que disfrutes tanto como yo haciéndolo en casa!
En un tazón grande, mezcla la levadura con el azúcar y el agua tibia. Deja reposar durante unos 5-10 minutos, hasta que la mezcla esté espumosa. Esto indica que la levadura está activa.
Añade el aceite de oliva y la sal a la mezcla de levadura. Poco a poco, incorpora la harina, mezclando hasta formar una masa suave.
Amasa la masa en una superficie ligeramente enharinada durante unos 5-7 minutos, hasta que esté suave y elástica.
Coloca la masa en un tazón ligeramente engrasado, cúbrela con un paño limpio y déjala reposar en un lugar cálido durante 1 hora, o hasta que haya doblado su tamaño.
Después de que la masa haya reposado, divídela en 8 porciones iguales. Forma bolitas con cada porción.
En una superficie enharinada, estira cada bolita de masa con un rodillo, hasta obtener círculos de aproximadamente 1/4 de pulgada (0.5 cm) de grosor y 6 pulgadas (15 cm) de diámetro.
Precalienta una sartén pesada o una plancha a fuego medio-alto.
Coloca uno de los círculos de masa en la sartén caliente. Cocina durante 1-2 minutos, hasta que comiencen a formarse burbujas en la superficie.
Voltea el pan y cocina el otro lado durante 1-2 minutos más, hasta que esté dorado y bien inflado.
Retira el pan pita de la sartén y cúbrelo con un paño limpio para mantenerlo suave mientras cocinas el resto de los panes.
El pan pita se puede disfrutar caliente o a temperatura ambiente. Es perfecto para acompañar hummus, kebabs, ensaladas, o para hacer sándwiches.
Si prefieres, puedes hornear los panes pita en un horno precalentado a 230°C (450°F) durante 4-5 minutos, hasta que estén inflados y dorados.
Puedes usar harina integral o una mezcla de harina integral y harina blanca para hacer una versión más saludable.
Prueba agregando hierbas secas, como orégano o tomillo, o semillas como sésamo o comino a la masa para darle un toque extra de sabor.
El pan pita se puede almacenar en un recipiente hermético a temperatura ambiente durante 2-3 días o congelarlo hasta por 2 meses. Simplemente caliéntalo en una sartén o en el horno antes de servir.
Chef Goya es un renombrado experto culinario, conocido por su habilidad para transformar ingredientes simples en platos extraordinarios. Con más de dos décadas de experiencia en las cocinas más prestigiosas del mundo, ha perfeccionado el arte de la cocina, fusionando técnicas tradicionales con innovaciones modernas. Nacido en una familia Mexicana apasionada por la gastronomía, Chef Goya desarrolló su amor por la…
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